domingo, 7 de octubre de 2007

Buscando al asesino de la prensa



Hallar al presunto futuro asesino parece crucial, mientras el olor a muerte ronda las redacciones. Al diario en papel muchos le pronostican pocas horas. Y es que cada vez son más las personas que responden a la pregunta “¿qué pasó hoy?” visitando Internet.
Es posible que el periódico, en formato papel, perviva, demostrando que sus particularidades son trascendentes, como ya nos los hizo ver el cine cuando surgió la televisión. Pero es sólo posibilidad, y más bien vista desde lo no probable.
La “prensa está enferma”, pero quizás el desenlace no sea la muerte, sino el cambio, la adaptación a la era digital.
El futuro de la prensa parece estar escrito en lenguaje binario, trasmitido por madejas de cables y circuitos, publicado en una pantalla, realizado por periodistas que saben tanto de html como de gramática y recibido por lectores que pueden ser paralelamente generadores de contenido.
Usuarios que se moverán de una noticia a otra, en segundos, incontables fuentes informativas, nuevas herramientas (el hipertexto, los elementos multimedia), la interactividad, planas diseñadas según las preferencias de cada lector, impondrán al periodista otra forma de hacer.

martes, 2 de octubre de 2007

Cebrián en la protohistoria de la era digital

Un hombre de la vieja guardia, el director fundador del periódico El País, Juan Luis Cebrián, habló sobre antiguos fantasmas del periodismo y nuevos retos, en la 62 Asamblea General de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP)
Comenzó con las palabras críticas que Kierkegaard, John Stuart Mill, Honoré de Balzac y Charles Dickens dejaron como legado para la profesión, desfiló por comentarios históricos sobre el nacimiento de la gazeta y expuso sus reflexiones etimológicas acerca de la palabra periodismo, para terminar con un anuncio lapidario hecho por Philip Mayer, autor de “Vanishung Newspaper”: “el año 2043 será el último en el que se editen diarios tradicionales, al estilo de los de hoy en día”.
Según Cebrián las redacciones ya han sido transformadas, y la irrupción de las nuevas tecnologías ha modernizado su quehacer y modificado su estructura y organización. Pero ahora falta que el cambio ataque niveles más profundos: el producto mismo.
Ya estamos viviendo la “protohistoria de la era digital” y ante el desafío que esto presupone un periodista como él no puede restarse de prevenir sobre sus riesgos, adelantar temas de discusión, y anticipar consecuencias. Menciona entre ellos “el devenir de la democracia” en este nuevo contexto, “la proliferación de informaciones cuya fiabilidad resulta prácticamente nula” y el “proceso de oscurantismo y manipulación de las noticias sin precedentes” que cree provoca el periodismo digital.
Pero, acepta finalmente, que la metamorfosis del papel al computador, ya ha comenzado.

lunes, 1 de octubre de 2007

Cuando el periodismo se escribe en html

La disminución de medios informativos donde ejercer la labor periodística, la tendencia mundial a disminuir la venta de diarios, y en algunos países, la gran cantidad de profesionales, que no logran desempeñarse dentro del campo propio debido a una saturación del mercado profesional, dan un conjunto poco alentador.
La era digital parece estar allí para convertirse en solución, pero hay que saber como utilizar ese salvavidas. El periodista del siglo XXI tendrá que redefinirse. Y asumiendo este reto, pasará parte del presente siglo.
Ya algunos se refirieron a que agregados podría contener esta transformación. Max Magee, de la Universidad de Norhwestern, definió 35 habilidades en su tesis de maestría, que las facultades de comunicación deben tener en cuenta en la formación de los nuevos periodistas.
Ya no sólo será necesario conocer de redacción, acentos, manejo de fuentes, y otros tantos saberes relacionados con el quehacer tradicional del periodismo. El nuevo profesional también deberá adentrarse en esa madeja que ha sido predominante dominada por los llamados computines: “HTML, Flash, usabilidad web, cómo escribir para Internet, uso de sistemas de administración de contenido, creación de productos multimedia, edición de audio y video, administración de comunidades en línea” y un largo etc. Y lo que es trascendental, deberá estar preparado para tratar con un receptor activo, que puede convertirse también en un generador de contenido.
Por Guillermo Franco.
enero 28 de 2007